A lo largo de la vida con esfuerzo y dedicación has logrado obtener tu patrimonio, este se puede ver reflejado ya sea en una casa, un automóvil, ahorros o algún negocio, sin duda tenerlos ha significado trabajo, sacrificio y una buena estrategia financiera.
Es posible que usted y su cónyuge sean dueños de bienes en conjunto, y seguramente tengan una casa, carros, muebles y otras cosas. Los bienes que usted y su cónyuge tienen juntos se llaman bienes matrimoniales.
Y también en el caso de que tengan deudas en conjunto, ya sea por una hipoteca, un préstamo de carro, deudas de tarjetas de crédito o préstamos personales, en este caso las deudas por las que juntos son responsables se les denominan deudas matrimoniales.
Por lo que una parte importante de su divorcio es dividir sus bienes y deudas.
Existen ocasiones en que las parejas ya no quieren seguir juntas y llegan al divorcio, es ahí cuando es momento de reordenar estos bienes, por lo que te diremos que es lo que tienes que hacer con tus bienes después del divorcio:
* En primera instancia, si es que contrajiste matrimonio legalmente te aconsejamos realizar inmediatamente el proceso de divorcio, ya que erróneamente hay muchas ex parejas que solo se distancian y dejan este trámite para más adelante, una de las consecuencias de dejar esto así es que uno no sabe qué podría pasar en un futuro y en el caso de un lamentable suceso como tu fallecimiento, tu ex pareja podría reclamar tus bienes como beneficiario.
*Realizar ante notario tu testamento desde el momento en que cuentas con bienes patrimoniales ya que erróneamente la mayoría de las personas tiene la creencia de que este trámite se debe hacer cuando eres un adulto mayor, como ya te hemos comentado en artículos anteriores, el testamento es seguridad patrimonial para tu familia y no quiere decir que sea una sentencia de muerte.
*Otro de los trámites igual de importantes a reordenar, es el pago mensual de cualquier crédito o hipoteca que se tenga, poniéndole especial atención a el pago del seguro de vida de su titular, ya que en caso de fallecimiento, la deuda quedará saldada. Por lo que te sugerimos tener a la mano la información de este bien, así como enterar a tu familia los datos de los beneficiarios del bien inmueble y del seguro de vida, hay que considerar que, en el caso del crédito Infonavit, al morir sin testamento, quien tiene que llevar a cabo el trámite de cancelar el crédito y reclamar el inmueble, será el beneficiario que designo el titular del crédito ante el seguro social, o quien determine la Junta Federal de Conciliación y Arbitraje.
*En el caso de cuentas bancarias, seguros de vida, IMSS, ISSSTE o Afore: Al realizar los trámites de los antes mencionados, te solicitan el o los nombre de los beneficiarios del saldo de tus cuentas, y estos pueden ser, tu pareja, padres e hijos hasta la edad de 16 años o, 25 años, en la cuestión de poder manifestar que continúan sus estudios. Es de suma importancia que se mantenga actualizada esta lista de beneficiarios y sus porcentajes correspondientes, ya que en caso de que fallezca el titular, recibirán el ahorro y podrían ser acreedores a una pensión.
La Ley del Seguro Social reconoce a los siguientes familiares como beneficiarios: esposa, esposo o concubina; hijos menores de 16 años o también, en caso de discapacitados, enfermos crónicos o estudiantes hasta los 25 años. Los que también tienen derecho a reclamar el ahorro de la pensión son los padres del trabajador difunto, siempre que sean dependientes económicos de el.
*Crédito automotriz: Si lograste obtener un vehículo mediante un crédito, es muy seguro que en este también estés costeando un seguro de vida, por lo que te recomendamos solicitarle a tu asesor verificar a quién dejaste como beneficiario, pues esta será la persona que pueda reclamar legalmente el auto.
Si te separaste de tu pareja y quieres que los beneficiarios sean tus hijos menores de edad, te recomendamos que, junto con el cambio de beneficiarios en las diferentes modalidades antes presentadas, también cuentes con un testamento en donde se designe a un tutor legal, quien será el que administre los fondos mediante un fideicomiso.
En caso de no realizar este trámite, tu ex pareja y su futura familia podrían terminar siendo los administradores de los bienes.
Lo más importante es mantener informados a los beneficiarios sobre aquello a lo que pueden tener acceso en caso de que tú faltes, es mejor dejar cuenta claras y beneficiarios bien identificados, en lugar de una serie de pleitos familiares, trámites engorrosos, y que tu patrimonio que adquiriste a lo largo de tu vida se quede en manos de personas que no deseabas las disfrutaran.