Generalmente la mayoría de los abogados no cobran las consultas que le hacen sus clientes en determinados asuntos que requieren de un asesoramiento legal, sin embargo lo importante es obtener un mayor provecho de cada reunión que tenemos con el profesional.
Además dependiendo del caso a tratar con nuestro abogado y de ser necesario que accione judicialmente, percibirá sus honorarios correspondientes. No obstante esto, se recomienda llevar un bosquejo de preguntas relacionadas al tema a tratar para asegurarnos de cómo proceder legalmente.
Por otro lado, reconocemos que para nosotros que no somos letrados desconocemos muchos términos utilizados por los abogados y por ende no entendemos mucho de sus tecnicismos. Seguramente podemos solicitarle que nos explique en palabras fáciles de entender o comunes a nuestro vocabulario, comprendemos que para ellos dentro del ambiente judicial se manejan con términos que para nosotros no son habituales.
A continuación algunas recomendaciones:
Recomendaciones:
- En primer lugar, a la hora de buscar un letrado profesional nos aseguraremos de que goce de buena reputación y sea recomendable no solo por la solvencia en los casos sino por su ética profesional. Como también que se caracterice por su discreción y confiabilidad al hacerse cargo de nuestro caso en particular.
- Aunado a esto es esencial que el abogado cuente con una amplia experiencia y este capacitado en el tipo de problema al que nosotros le exponemos.
- Podemos solicitarles y de hecho muchos abogados, se manejan por escrito el procedimiento a seguir para que su cliente lo comprenda mejor. Y además pueda llevar consigo todo lo detallado después de la reunión con el letrado.
- Una vez que se ha resuelto accionar legalmente y nuestro abogado comience a pedirnos documentación y demás relativos para anexar al caso, pero es conveniente dejarle las copias y conservar los papeles originales nosotros mismos.
- De seguro le firmaremos un poder a nuestro abogado como apoderado propiamente dicho, o en otras palabras lo estamos autorizando o habilitando para que actué judicialmente.
- Al mismo tiempo vamos a convenir con el letrado el pago de sus honorarios correspondientes, en el transcurso de todo el proceso o al finalizar es cuando y según lo acordado le pagaremos.
- En caso de haber gastos adicionales, como por ejemplo distintos trámites judiciales que así lo requieren y que nos correspondan a nosotros lo pagaremos pero también podemos exigir los recibos pertinentes.
- A si mismo podemos exigir de nuestro abogado que nos firme un contrato de Prestación de sus Servicios Profesionales, hacerlo así nos ahorrara muchos problemas en el futuro.
- Algo primordial es que nos asesore y prepare de la posible resolución del caso, para que no nos tome por sorpresa y al mismo tiempo sepamos cómo enfrentarnos y continuar en el proceso.
Para concluir algo fundamental con el profesional que lleva nuestro caso es, una comunicación fluida entre abogado y cliente. Que nos vaya informando convenientemente sobre la marcha de nuestro caso, las novedades del mismo, y también los posibles inconvenientes u obstáculos que van surgiendo.