El hecho de que podamos especular que estos dos términos representan lo mismo, estamos seguros que en más de una ocasión has escuchado hablar sobre un caso judicial en el cual existe una acusación por ‘homicidio‘ y en otras por ‘asesinato‘, en el ámbito jurídico son palabras que presentan diferencias representativas en el momento de juzgar un caso y decretar la duración de una condena hacia un acusado.
Es importante tener en claro el factor común que muestran estos delitos que es meramente la acción de causar la muerte a otra persona, mediante la información recopilada de los hechos ocurridos se establecen los parámetros a partir de los cuales se asientan las diferencias entre estos términos y se determina la duración de la pena dependiendo del delito cometido.
Se considera el delito de asesinato cuando existe el acto de causar la muerte a otra persona se lleva a cabo bajo alguna de las siguientes circunstancias:
Alevosía: Es cuando se lleva a cabo con premeditación y provocando una situación en la que la víctima no puede defenderse o se encuentra en condición de inferioridad o desamparo.
Ensañamiento: Es cuando el agresor aumenta de forma inhumana el dolor y el sufrimiento de la víctima.
Concurrencia de precio. Hace referencia a cuando el crimen se comete a cambio de recibir una retribución, ya sea económica o material.
En caso de que el juez encargado de juzgar el caso considere que puede haber existido cualquiera de estos supuestos en el crimen o los tres a la vez, la imputación se elevará a delito de asesinato.
Una vez sabido esto, podemos decir que la principal diferencia entre homicidio y asesinato reside en que un delito es considerado homicidio, cuando en el crimen no se contempla ninguna de las tres circunstancias señaladas en el apartado anterior y, en cambio, en el asesinato se contempla una o una combinación de las tres.
El delito de homicidio, es determinado mediante la nula existencia de alevosía, ensañamiento o concurrencia de precio, estableciendo para estos distintos rangos.
Los rangos principales de si es considerado homicidio son:
Voluntario: Cuando el crimen es causado con intencionalidad pero sin llegar a alevosía.
Involuntario: Se determina cuando se causa la muerte de otra persona sin intención alguna, como podría ser el caso de un accidente de tráfico.
Negligente: Es cuando la muerte se produce a causa de un fallo o negligencia como podría ser un fallo médico durante cualquier operación quirúrgica.
Duración de las penalidades por el delito cometido:
*En caso de homicidio, la pena puede variar de un año hasta 15 años de prisión. La diferenciación de la pena dependerá de si se trata de un homicidio voluntario, que estaría entre los diez y quince años de cárcel, o homicidio involuntario o negligente con condenas de entre uno y cuatro años de cárcel.
*La pena por asesinato es más alta y puede considerarse de 15 a 25 años de cárcel.